EL HOSPITAL GINECO-OBSTÉTRICO “DR. EUSEBIO HERNÁNDEZ PÉREZ: LA MEMORIA SIMBÓLICA DE SU ARQUITECTURA

Resumen

El siguiente texto analiza la simbología y funcionalidad de la arquitectura del Hospital Gineco-Obstétrico “Dr. Eusebio Hernández Pérez” (antigua Maternidad Obrera) como expresión concreta de las políticas de atención materno-infantil en Cuba. A partir de una perspectiva histórica y social, se destaca cómo esta institución, inaugurada en 1941, ha sido un referente para la atención a mujeres embarazadas y recién nacidos de todo el país, en especial para los municipios de La Lisa, Playa y Marianao, en La Habana. La intencionalidad del diseño del hospital, elaborado por el arquitecto Emilio Soto, se asemeja simbólicamente al aparato reproductor femenino, representando el útero, las trompas de Falopio y los ovarios, transmite el valor de la maternidad, aun cuando en sus inicios no garantizaba el acceso equitativo a los servicios de salud. Con el triunfo de la Revolución Cubana en 1959, el hospital transformó su funcionamiento mediante la implementación de nuevas políticas de salud con enfoque preventivo, dando lugar al fortalecimiento de los servicios especializados de neonatología, unidades de cuidados intensivos, programas de inmunización, lactancia materna y seguimiento postnatal. Esta transformación permitió que la institución pasara a ser un centro asistencial, con un espacio de memoria social donde se integran la arquitectura, las experiencias vividas y el compromiso político que lo respalda. El trabajo destaca que el hospital representa un lugar de construcción de memoria colectiva, donde la praxis diaria se entrelaza con el diseño simbólico, reafirmando el valor de la maternidad como una prioridad del Estado cubano.