CULTIVO DE HORTALIÇAS: UNA ACCIÓN EDUCATIVA MEDIOAMBIENTAL EN LOS ÚLTIMOS AÑOS DE LA ENSEÑANZA PRIMARIA

Resumen

En el contexto de la educación ambiental y alimentaria, el huerto escolar surge como una herramienta pedagógica que contribuye a la formación ciudadana de los niños de la enseñanza primaria, al integrar el cultivo de hortalizas con prácticas de responsabilidad ambiental y aprendizaje interpersonal y cinestésico. El contacto directo con el medio natural favorece la comprensión sobre el origen de los alimentos, lo que permite elaborar un menú variado y rico en nutrientes. Así, se propuso desarrollar acciones educativas medioambientales, mediante el cultivo de hortalizas, en la enseñanza de Ciencias Naturales de la Escuela Municipal de Passagem Franca, Maranhão. La investigación utilizó metodologías de enfoque cualitativo, del tipo investigación-acción, y cuantitativo, del tipo experimental, con la aplicación de la escala Likert para la recopilación de datos. Participaron en el estudio 43 alumnos de las clases de 8.º curso «A» y «B» y de 9.º curso «A» y «B», del turno de mañana. Los resultados de la investigación pusieron de manifiesto que la implantación del huerto escolar se llevó a cabo de forma colaborativa por los alumnos, bajo la orientación de los profesores. El análisis de la encuesta aplicada indicó que el 83,3 % de los participantes reconocen los beneficios de la creación de acciones educativas medioambientales en la enseñanza de las Ciencias Naturales, ya que las consideran fundamentales para la formación de ciudadanos más conscientes y comprometidos con el proceso educativo. Por el contrario, el 16,7 % mostraron su desacuerdo. En general, se entiende que, además de promover una alimentación saludable, el huerto escolar también contribuye al proceso de enseñanza-aprendizaje, ya que proporciona un contacto directo con el medio ambiente y estimula prácticas colectivas que refuerzan los valores sociales, culturales y ecológicos, en equilibrio con la naturaleza.