EDUCACIÓN INCLUSIVA: PRÁCTICAS Y RETOS PARA UNA ESCUELA MÁS ACOGEDORA
DOI:
https://doi.org/10.56238/arev7n6-149Palabras clave:
Equidad escolar, Mediación pedagógica, Desarrollo inclusivo, Participación educativa, Prácticas colaborativasResumen
Este artículo tuvo como objetivo analizar las prácticas y los desafíos de la educación inclusiva, con miras a construir una escuela más acogedora. La investigación se centró en identificar acciones pedagógicas que favorezcan la participación del alumnado con discapacidad, especialmente de aquellos con Trastorno del Espectro Autista, así como en problematizar los obstáculos estructurales y simbólicos que limitan la implementación de políticas inclusivas. La metodología adoptada fue de naturaleza bibliográfica, con un enfoque cualitativo, basada en el análisis crítico de producciones académicas publicadas entre 2021 y 2024. La selección de textos consideró su relevancia temática y su adecuación al objeto de estudio. Se constató que una inclusión escolar efectiva exige prácticas pedagógicas sensibles a las singularidades de los sujetos, la reorganización curricular, el trabajo colaborativo y la formación continua del profesorado. También se identificaron obstáculos como la falta de recursos, la devaluación de la diversidad y la falta de preparación profesional. Se concluyó que la consolidación de la educación inclusiva presupone abordar las desigualdades estructurales, superar los conceptos normativos y valorar la diferencia como principio educativo. El estudio reafirma la importancia de la formación ética, política y pedagógica de los educadores como condición para fortalecer las prácticas inclusivas, proponiendo, en definitiva, la necesidad de una investigación a fondo sobre el papel de los profesionales de apoyo y la participación de las familias en el proceso inclusivo.
