ESTRATEGIAS RESTAURATIVAS EN DIENTES TRATADOS ENDODÓNTICAMENTE: IMPACTO EN LA RESISTENCIA MECÁNICA

Resumen

Los dientes sometidos a tratamiento endodóntico presentan un comportamiento biomecánico distinto al de los dientes vitales, lo que requiere abordajes restauradores capaces de compensar la fragilidad estructural adquirida tras el tratamiento de conductos. La elección inadecuada de la rehabilitación coronal puede provocar fracasos tempranos, fracturas extensas y pérdida dentaria. Por lo tanto, este estudio tuvo como objetivo sintetizar y analizar la evidencia científica más reciente sobre estrategias restauradoras en dientes tratados endodónticamente y su impacto en la resistencia mecánica. Se realizaron búsquedas en las bases de datos PubMed, SciELO (Scientific Electronic Library Online) y Google Académico, utilizando los términos "diente no vital", "restauración dental", "endodoncia", "resistencia a la fractura" y "materiales dentales". Los estudios demostraron que la supervivencia clínica de estos dientes depende principalmente de la integridad estructural remanente y de la capacidad de la restauración para redistribuir las tensiones oclusales. Se ha observado que las intervenciones restauradoras conservadoras pueden ser satisfactorias cuando existe un mantenimiento significativo de la estructura coronal, mientras que los abordajes adhesivos indirectos con cobertura cuspídea tienden a tener un mejor rendimiento en dientes con caries grandes. Además, los materiales restauradores reforzados con fibra han demostrado potencial para modificar el patrón de fractura, favoreciendo fallas menos destructivas. Sin embargo, persisten reportes de fallas relacionadas con flexión canina excesiva, fracturas radiculares y deficiencias en el sellado coronal. Por lo tanto, se puede considerar que la definición de la estrategia restauradora debe basarse en criterios biomecánicos y conservadores, considerando las particularidades de cada caso clínico. Si bien la ausencia de protocolos estandarizados y la limitación de estudios clínicos a largo plazo indican la necesidad de más investigaciones para fortalecer la toma de decisiones basada en la evidencia.